• Type:
  • Genre:
  • Duration:
  • Average Rating:

Reflexiones

¿Cómo construimos nuestra realidad?

Nuestra realidad la construimos día a día con nuestros actos, con los pensamientos, y por supuesto con todo aquello de lo que nos rodeamos. Y esto se refiere también a lo que vemos y escuchamos. Si nos rodeamos de desarmonía, no podemos preguntarnos después porque nos sentimos exhaustos o con dolores corporales. Es importante elegir bien aquello que nos rodea, porque así estamos creando nuestra propia realidad, sin dejar que otros lo decidan por nosotros.

La importancia del discernimiento

En el mundo actual, un mundo que muchos caracterizan como “líquido”, en el que la información es sumamente abundante, es necesario más que nunca aplicar el discernimiento. En otras épocas, la información estaba muy limitada, era controlada y restringida a estamentos sociales muy determinados. Las élites sabían que la información es poder. Sin embargo, en la actualidad debido a la popularización de Internet, las redes sociales o los diferentes dispositivos digitales, la información se ha vuelto masiva, pasando de la escasez al exceso.

¿Cómo cambiar nuestra mirada del mundo?

Según las clasificaciones duales vivimos nuestras vidas, juzgando a los demás o incluso a nosotros mismos, desgarrados siempre por una frontera, por una línea divisoria que nos lleva a los dos extremos, a las dos polaridades. Pero, ¿y si pudiéramos salir de esa dualidad enfermiza?

La armonía del presente

El único tiempo que importa es el presente. Esta frase se ha convertido en un axioma, en una sentencia que todos aceptamos. Sin embargo, ¿somos conscientes realmente de su importancia? Dicen que los psicólogos que aquellas personas que se encadenan a su pasado, sufren de depresión, mientras que aquellas que viven preocupadas por el futuro, son devoradas por la ansiedad. Por lo tanto, focalizarnos en el presente parece la solución más lógica.

¿Cómo salir de la prisión de nuestras mentes?

Para salir de este laberinto de Dédalo, tenemos que emplear un hilo de Ariadna que nos lleve a volver a controlar nuestra mente, colocarla nuevamente a nuestro servicio y no al revés. Para ello, la búsqueda de nuestra verdad interior es fundamental, es la escalera que nos permitirá acceder a un nuevo nivel en la interpretación de lo que nos rodea.

El secreto de las experiencias

Las experiencias surgen a nuestro alrededor, en todos los ámbitos en los que nos movemos diariamente: en el trabajo, en nuestra casa, en la calle, en el transporte público,… Las experiencias provocan en nosotros reacciones, sentimientos, emociones, ya sean de miedo, amor, dolor. Muchas veces nos preguntamos porque nos ocurren algunas situaciones, porque nos pasa a nosotros.

¿Cuál es nuestro propósito?

¿Cuántas veces a lo largo de nuestra vida nos hemos preguntado cuál es nuestro propósito? El propósito parece algo muy lejano, monumental, algo heroico digno de ser grabado en monumentos. Es una palabra cuyo peso muchas veces nos aprisiona, nos obliga a buscar un fin grandioso y enorme. ¿Y si esto no fuese así? ¿Y si llegar al propósito de cada uno no fuera un “valle de lágrimas”? ¿Y si todo fuese más sencillo y simple de lo que pensábamos?

Las realidades del tiempo

Es indudable que el tiempo se va modificando, su realidad evoluciona como se nos cuenta en el libro “La Raza 33” y vamos entrando en una nueva etapa, en la que entraremos en las coordenadas de nuestro cosmos. El tiempo no debe funcionar como una cárcel que nos constriña, sino que al elevarnos por encima de él podremos entrar en esas otras realidades, en las del mundo divino como nos explicaba Agustín de Hipona, o en las del cosmos como nos cuenta Anael.

Escalera cósmica

De igual manera que una escalera, los códigos estelares de Origen Estelar nos proponen un camino hacia la sabiduría. Cada código nos aporta el conocimiento de las razas estelares que crearon al ser humano; cada código es un mensaje, una nueva forma de ver la vida, una manera diferente de posicionarnos ante lo que nos rodea.

Umbrales cósmicos

Los umbrales cósmicos siempre están abiertos y sólo aquel atento y conectado con su pureza puede atisbar la luz inconmensurable que habita en lo profundo de su conciencia interna y externa. Por ello, todos los días existen geométricas sagradas, números que conectan, colores que forman puentes, sonidos que sanan. Todos los días hay un 11-11, un 12-12 o un 777; todos los días hay portales, designios multidimensionales abiertos para cuando en verdad estamos preparados. Y ya no basta con tener intención del buen hacer, porque hoy en día lo que hace falta es HACER.

Hay que manifestar el ser sagrado que en verdad somos y además resignificar la forma de vincularse con la existencia, con los demás seres humanos y con toda expresión de vida que nos rodea. Pero si no puedes sentirlo, si aún no conectas con quien en verdad eres, entonces espera, ten paciencia y comienza a dar los primeros pasos hoy. Porque la calma es tu aliada y la prisa a veces enceguece al más común de los mortales. «El camino se hace al andar» como escribió nuestro querido Antonio Machado.

Hay una escalera también para cada uno de nosotros, cada peldaño es una dimensión que, aunque sea desconocida no significa que sea mala, porque querido lector, detrás de cada peldaño está la puerta y detrás de ella sólo la plenitud. Caer en el auto engaño de que acciones momentáneas o esporádicas nos hará ganar un pedacito de cielo, tiene un muy corto camino y mucha frustración por delante.

  • ¿Cómo se hace? HACIENDO
  • ¿Cómo se sube un peldaño? IMPULSÁNDOTE
  • ¿Cómo se abre una puerta? ABRIÉNDOLA

Ahora sólo resta que tengas dentro de tu corazón el suficiente coraje, la autoestima necesaria y el más alto amor al plan universal como para empezar a mover ficha ya, tu propia ficha porque al fin y al cabo tu existencia te pertenece solo a ti; eres tú el que observa, el que respira e intuye, el que tiene el poder de ver la realidad intangible que maneja los hilos de la materia. Es hora de que cada individuo asuma su fuerza y su Origen estelar, para comenzar ese camino que nuestros padres antecesores nos mostraron. Nuestros amados Murianos y Atlantes que transfirieron incontables señales para descubrir quienes somos en verdad. No te auto engañes, el tiempo no determina la apertura de un portal porque los umbrales siempre están abiertos. Comencemos a caminar. 

Anael

Scroll to top